
Todo lo que necesitas saber sobre el método de contabilidad por devengo (accrual accounting) para mejorar la gestión financiera
El método de contabilidad por devengo, también conocido como accrual accounting, es una técnica contable fundamental para cualquier empresa que busca una gestión financiera eficiente y precisa. En este artículo, exploraremos en detalle qué es el método de contabilidad por devengo, cómo funciona y por qué es importante para mejorar la gestión financiera de una organización.
¿Qué es el método de contabilidad por devengo?
El método de contabilidad por devengo es un enfoque contable que reconoce los ingresos y gastos en el momento en que se generan, independientemente de cuándo se cobran o pagan. Esto significa que los ingresos se registran cuando se obtienen y los gastos se registran cuando se incurren, lo que proporciona una imagen más precisa de la situación financiera de una empresa en un período determinado.
¿Cómo funciona el método de contabilidad por devengo?
Para aplicar el método de contabilidad por devengo, las empresas deben seguir ciertos principios contables, como el principio de reconocimiento de ingresos y el principio de coincidencia de gastos. Esto implica registrar los ingresos en el momento en que se gana, independientemente de si se ha cobrado, y reconocer los gastos cuando se incurren, aunque el pago se realice en un momento posterior.
Importancia del método de contabilidad por devengo en la gestión financiera
El método de contabilidad por devengo es crucial para una gestión financiera efectiva por varias razones. En primer lugar, proporciona una visión más precisa de la rentabilidad de la empresa al reflejar los ingresos y gastos en el período en que se generan. Esto ayuda a los gerentes a tomar decisiones informadas sobre la asignación de recursos y la planificación financiera.
Además, el método de contabilidad por devengo cumple con los principios contables generalmente aceptados y es requerido por la normativa contable en muchos países. Cumplir con estos estándares mejora la transparencia y la credibilidad de los estados financieros de la empresa, lo que es fundamental para atraer inversores y cumplir con las obligaciones legales y fiscales.