En el mundo del trading, es fundamental comprender el concepto de subyacente, ya que juega un papel crucial en la operativa de los mercados financieros. El subyacente se refiere al activo financiero en el que se basa un derivado financiero, como opciones, futuros o swaps.
Un ejemplo claro del concepto de subyacente es el caso de las opciones sobre acciones. En este caso, la acción es el subyacente, ya que el valor de la opción está directamente relacionado con el precio de la acción subyacente. Si el precio de la acción subyacente aumenta, el valor de la opción de compra también aumentará.
Otro ejemplo común es el mercado de futuros, donde el subyacente puede ser un índice bursátil, una materia prima o incluso una divisa. Por ejemplo, en el caso de los futuros sobre el petróleo, el subyacente sería el precio del barril de petróleo crudo.
Es importante tener en cuenta que el subyacente es el activo en el que se basa el derivado, y cualquier cambio en el precio o valor del subyacente puede tener un impacto directo en el precio del derivado financiero. Por lo tanto, los traders y los inversores deben estar atentos a la evolución del subyacente para tomar decisiones informadas en sus operaciones.